El consumo de cemento en España cerró finalmente 2013 con un descenso del 19% respecto al año anterior. La caída en diciembre fue del 7%, lo que supuso una nueva pérdida cercana a las 55.000 toneladas, situando el consumo del último mes del año en poco más de 700.000 toneladas.
El año 2013 se ha convertido, por tanto, en el sexto con caídas consecutivas de dos dígitos para el sector cementero desde el inicio de la crisis. Por sectores, el consumo de cemento a nivel nacional destinado a vivienda ha sido de un 19%, a edificación no residencial un 24% y a obra civil un 57%.
Las exportaciones, que son una de las principales acciones del sector para intentar compensar la crisis de la demanda interna, han ralentizado su crecimiento en los últimos meses del año. “Mientras que hasta septiembre de 2013 crecieron, gracias a los esfuerzos de la industria, a un ritmo medio del 34%, en el último trimestre se han visto frenadas, hasta reducir a un 12% el diferencial con 2012. Se trata de un porcentaje a todas luces insuficiente para compensar la caída de la demanda doméstica”, explicó el director general de Oficemen, D. Aniceto Zaragoza.
Las previsiones para 2014 no son más alentadoras, con un descenso estimado entre un 7 y 8%. Solo se atisban inicios de cambio de signo para 2015, “condicionados, eso sí, a un compromiso por parte de la Administración, que debe recuperar la inversión pública, si no quiere que nuestras infraestructuras pierdan el tren de los vecinos europeos; y dotar de un entorno estable a los precios eléctricos para que la industria pueda competir en los mercados internacionales. También esperamos una recuperación de la vivienda que ha caído a niveles extremadamente bajos para un país como el nuestro”, añadió Zaragoza.
Compartir en redes sociales
